27 diciembre, 2007

"¿POR QUÉ NO TE CALLAS?" OTRA VERDAD INCÓMODA (2ªPARTE)


Hace algo más de un mes, publiqué la primera parte de este serial sobre el golpe de Estado que se vivió en Venezuela en 2002. En aquel entonces, estaba fresco en la memoria el "¿por qué no te callas?" que le espetó el rey de España a Hugo Chávez. Entendí que venía bien conocer la verdad sobre el golpe y conocer si el presidente venezolano tenía o no tenía razón respecto a la participación de elementos extranjeros –incluidos españoles– en aquel intento de arrebatarle el poder. Las críticas a Chávez no han cesado desde entonces; y lo grave es que la mayor parte proceden de la falta de información que tiene la sociedad española, a menudo contaminada por determinados intereses que han provocado que la imagen que exista del bolivariano sea nefasta. Con sus modos y ademanes, él no ha contribuido mucho a lo contrario. Expondré a continuación la segunda parte de ese texto prometido sobre el citado Golpe. Los datos hablan por sí solos.

Crónica de una insurrección programada
El golpe se produjo el 11 de abril de 2002, apenas medio año después de que el mundo sufriera los atentados del 11-S. Aparentemente, el asalto al poder se produjo de forma espontánea tras una manifestación en la cual fallecieron varias personas abatidas por francotiradores que, en apariencia, eran soldados próximos al presidente Chávez. Aquello provocó una rápida reacción popular, encabezada por determinados partidos de la oposición y por grupos empresariales, a quienes prestaban su colaboración determinadas facciones del Ejército y los cuerpos de seguridad. Horas después, los insurgentes tomaron el Palacio de Miraflores, la sede de la presidencia del Gobierno.

Los medios de comunicación de todo el mundo informaron al instante de lo que sucedía en las calles de Caracas. Todas las noticias rezumaban un profundo deseo de que el Golpe concluyera con éxito. Al fin y al cabo, la imagen que nos habían vendido de Chávez era la de un dictador y, por una vez en la vida, el mundo occidental parecía ver con buenos ojos la caída de uno de esos militares sudamericanos tan proclives a soslayar los derechos humanos. El problema es que no siempre es verdad aquello que nos transmiten desde el Poder.

Cuando el día 12 de abril se anunció la renuncia de Hugo Chávez, hubo alharacas en la Tierra. Al parecer, un avión lo enviaría a Cuba o a algún otro país dispuesto a acoger al depuesto mandatario al tiempo que el líder patronal Pedro Carmona se autonombraba nuevo Presidente del Gobierno. Sin embargo, apenas 48 horas después de que se iniciaran las hostilidades, Chávez lograba detener el proceso y salvar su pellejo gracias a que los militares fieles al bolivariano actuaron de espaldas al golpista.

He de reconocer que, por aquel entonces, servidor era de los muchos que seducidos por las informaciones veían a Chávez como un auténtico lunar para la estabilidad de América. Además, aquellas noticias terribles sobre la actitud de los agentes de seguridad de Chávez resultaba intolerable en un líder demócrata: “Las fuerzas del orden lanzaron gases y dispararon a discreción”, se leía en un teletipo de la agencia Reuters. “Los partidarios de Chávez y las fuerzas del orden cargaron contra los manifestantes”, rezaba otra noticia de Associated Press. “Testigos relataron como miembros de la Círculos Bolivarianos próximos a Chávez se situaban en azoteas y empezaban a disparar”, pudo leerse en otra información publicada en España. Y así una y otra noticia... La “ola” llegó también a España, en donde un periódico de tirada nacional publicaba la mañana del 13 de abril la siguiente información: “Las víctimas cayeron en extrañas circunstancias, supuestamente a manos de francotiradores apostados en los edificios adyacentes. Esta teoría ha sido corroborada por los máximos dirigentes del empresariado y los sindicatos, quienes responsabilizan directamente a Hugo Chávez de las muertes: ‘Chávez se ha manchado las manos de sangre. El Gobierno tiene que asumir la responsabilidad. Francotiradores con armas de guerra han causado muertes que de ninguna manera es responsabilidad de los organizadores de la marcha’.”

Crimen para justificar el golpe
Pensaba que todo había ocurrido así hasta septiembre de 2003. Para entonces, ya manejaba determinadas informaciones que situaban a Estados Unidos tras el intento de derrocar a Chávez. Seguía siendo uno de los muchos que tenía el cerebro lavado por culpa de la auténtica campaña de desprestigio iniciada contra el insólito Presidente hasta que tuve un encuentro en Barcelona con varios inmigrantes venezolanos. Varios de ellos habían dado forma a una organización que tenía por objeto que se conociera la verdad sobre la realidad de aquel país hermano. Defendían las acciones de Chávez ya que se estaba demostrando que eran la mejor vía de salida para la pobreza de su país. Me dieron datos y referencias que me hicieron pensar, pero lo que de verdad me impresionó fue haber conocido a uno de aquellos hombres que recibió un balazo durante las manifestaciones del 11 de abril de 2002. Vio la cara de quien le disparó. Sabe quiénes eran: “Se trataba de los policías que apoyaban el golpe”. Y empecé a comprender que los medios de comunicación habían faltado a la verdad impulsados por las grandes televisiones venezolanas, controladas por los partidos opuestos a Chávez. Tanto es así que las víctimas no eran los opositores del presidente, sino sus defensores, porque fue a ellos a quienes se les había disparado a discreción. El testigo directo de aquella masacre y defensor de las políticas en beneficio de los más necesitados, quedó postrado para siempre en una silla de ruedas, pero le quedaba su voz, y la alzaba, la alzaba para quienes quisieran escuchar una verdad a la que medio mundo hacía oídos sordos.

La ejecución del golpe siguió las pautas de los atentados para los que se ofrece una versión que tiene por objeto desencadenar una serie de consecuencias. Si se lograba transmitir con éxito la versión de los golpistas, la opinión pública se sentiría enervada y entregaría su voluntad a quienes pretendían restablecer el orden democrático. Al mismo tiempo, si dicha versión se extendía hacia el exterior del país, la comunidad internacional acabaría por admitir la “legitimidad” del Golpe. En realidad, el plan es ciertamente parecido al que se activó tras el 11-S, sólo que en esta ocasión los actores y el escenario resultaban diferentes, aunque el autor del guión y el director de orquesta bien parecen el mismo.

Los medios de comunicación hicieron su “trabajo” de forma y manera extraordinaria. Algunos de ellos a sabiendas de que formaban parte del plan y otros engañados por lo que parecía la versión más razonable de los hechos. Casi todos esos medios acusaron de inmediato a Chávez de haber ordenado matar a los manifestantes. Especialmente implicada en divulgar esta versión se encontraba Univisión, cuyo dueño es Gustavo Cisneros, el hombre más rico del país y viejo amigo y compañero de negocios de la familia Bush. Analistas como el escritor Edgar González Ruiz lo consideran como uno de los principales inspiradores del Golpe de Estado en un trabajo titulado Los turbios negocios de los Bush en Venezuela (Rebelión.org, 23 de junio de 2004). Incluso publicaciones norteamericanas como Newsweek se hicieron eco de las denuncias del legislador Pedro Pablo Alcántara, para quien el asalto fue coordinado desde las oficinas de Cisneros en Venevisión, la filial local de su emporio, en donde se reunieron durante el Golpe el propio Cisneros con Pedro Carmona y con el presidente de la Conferencia Episcopal, Baltasar Porras, que también apoyó el Golpe habida cuenta de que Carmona era un destacado miembro del poderoso grupo eclesiático Opus Dei.

Ante la gravedad de los hechos, los manifestantes se mostraron a favor de cualquier intento por derrocar a Chávez. Se quiso dar la impresión de que el asalto al poder fue improvisado, popular y casi legítimo: “El pueblo de Venezuela derroca a Chávez”, se leyó en la primera plana de un diario español. Y aquella se convirtió en una opinión generaliza en casi todos los periódicos. No los culpo; posiblemente, ellos también fueron víctimas de esa ola de desinformación.

Al mismo tiempo que Carmona, Cisneros y los suyos llamaban asesino a Chávez, el Presidente español recibió desde la siguiente información por telegrama: “Los tres francotiradores pertenecían a la Policía Metropolitana de Caracas, a la policía del municipio de Batura y a la policía del municipio Chacao, todos ellos controlados por partidos opositores de Chávez”, escribió el embajador español. Lo que sí resulta extraño es que Aznar no reconociera públicamente que disponía de estos datos. Pero él no fue el único: “Manifestantes oficialistas, bajo las órdenes de Chávez, dispararon a manifestantes desarmados y pacíficos, causando 10 muertos y 100 heridos”, señaló el portavoz de la Casa Blanca el mismo 12 de abril. A la campaña también se sumó el Departamento de Estado: “Los eventos del día de ayer resultaron en un gobierno de transición. Aunque los detalles no están claros, acciones fomentadas por el gobierno provocaron la crisis de ayer y Chávez dimitió”, señaló Colin Powell, que tuvo arrestos de afirmar lo siguiente: “Los medios, de manera muy valiente, mantuvieron informado al pueblo”, añadió, olvidando que no sólo distorsionaron la realidad sobre quiénes habían abierto fuego, sino también ignorando que justo antes de ser destituido, cuando Chávez se dirigió por televisión al país, unas “repentinas” interferencias impidieron que pudiera escucharse lo que decía. A esto le llaman “actitud valiente”... (continuará)

04 diciembre, 2007

HISTORIA DE IBERIA VIEJA, NÚMERO 30


Ya está a la venta el número 30 de la revista Historia de Iberia Vieja. Espero que el número sea de vuestro agrado, porque los contenidos no pueden ser más interesantes. Como podéis ver, la portada está dedicada a un pensador universal, a un hombre que fue condenado por "impertinente", es decir, por ser la conciencia del Imperio romano. Me refiero a Séneca, cuya mención evoca sabiduría y conocimiento. Además, este número ofrece un amplio reportaje sobre la figura del añorado Juan Antonio Cebrián, el creador del mítico programa La Rosa de los Vientos de Onda Cero, que falleció el pasado 20 de octubre. Es un texto efectuado con todo el sentimiento posible, intentando acercar al lector la figura de este comunicador y divulgador de Historia y conocimiento.

Además, la revista ofrece un dossier con varios reportajes sobre el mundo de la historia del espionaje español. Podréis leer todos los datos sobre un personaje bastante desconocido, llamado Juan Pujol, alias Garbo, que pasa por ser uno de los hombres más decisivos de la Segunda Guerra Mundial. Y es que a Garbo se le debe el mérito de haber tejido entre bambalinas la derrota de Alemania en la guerra. Posiblemente, el espía más determinante de toda una época. Además, también podéis leer una exposición sobre la figura de los espías en las cortes reales desde hace siglos, especialmente de la influencia que tuvieron en la época de Felipe II.

Todos los temas son realmente interesantes. Y es que además de los citados, podéis conocer la historia de los corsarios españoles, cómo eran los torneos medievales (por Richard Barber, conocido medievalista inglés), las religiones de los primeros habitantes de la Península, la figura de los Almogávares, la verdadera historia -con imágenes espectaculares- del crucero Reina Regente, que se perdió hace más de un siglo en aguas del Estrecho (cuenta la historia Marcelino González, que es el subdirector del Museo Naval de Madrid) o el hallazgo en España de piezas de la civilización egipcia (explicadas por el doctor en Historia José Miguel Parra).

Estoy seguro que vais a disfrutar de la lectura de este número.

Y una vez más, os tengo que pedir disculpas por no poder actualizar el blog a la velocidad que quisiera. La dirección de la revista y la presentación del programa La Rosa de los Vientos ocupa mucho tiempo, pero en estos mismos días encontraréis muchas sorpresas en estas páginas. Eso sí, mientras tantas, disfrutad del número 30 de Historia de Iberia Vieja.

13 noviembre, 2007

"¿POR QUÉ NO TE CALLAS?" OTRA VERDAD INCÓMODA (PARTE 1ª)


El pasado sábado 10 de noviembre, durante la celebración de la Cumbre Iberoamericana en Santiago de Chile estalló el escándalo cuando el Rey de España alzó la voz y mandó callar al presidente de Venezuela, Hugo Chávez, cuando éste interrumpía a su homólogo español Rodríguez Zapatero para calificar como fascista al anterior mandatario español, José María Aznar. Nadie desconoce lo sucedido. Y analizado con frialdad, nadie puede sentirse satisfecho. Cierto es que la insistencia de Chávez en sus alusiones resultaba incómoda per se y reiterativa hasta conseguir nulidad argumental. Y más cierto es que, pese a que la reacción del Rey de España ha sido aplaudida y defendida en España, nadie puede justificarla y perjudicará gravemente la imagen de España en América y contribuirá a reforzar posiciones críticas contra la actitud de la "madre patria". "¿Por qué no te callas?", dijo Juan Carlos I, el único jefe de Estado no electo que participaba en la cumbre al mandatario que -guste o no- entre todos los asistentes más veces ha resultado elegido en las urnas.

Tras esta polémica subyacen muchos elementos trascendentes que iré desgranando en varios capítulos en relación al golpe de Estado fallido que apartó durante dos días del poder a Chávez en 2002. Según el mandatario venezolano, España tuvo una participación notable en aquel golpe. Precisamente, sobre este asunto escribí todo un capítulo en mi libro El Gobierno Invisible (Ed. Espejo de Tinta), fruto de una larga investigación. A continuación, recuperaré parte de esa información que puede servir para comprender mejor la situación. Para ello, nos situamos en el 18 de noviembre de 2004.


Un fiscal incómodo

Eran las 21.45 horas cuando aquel jeep que circulaba por la avenida Las Ciencias de Caracas (Venezuela) estalló en mitad de la calzada. Nada se pudo hacer para salvar la vida del único ocupante del vehículo…

Los autores del atentado habían investigado a conciencia su objetivo. Sabían de sus hábitos, de sus costumbres, de sus rutas. Conocían sus puntos débiles. Fruto de ese trabajo previo dedujeron que el mejor momento para montar el operativo era entre las 18.00 y 21.00 horas. Durante ese tiempo el coche permanecía estacionado en las inmediaciones del Instituto de Investigaciones Policiales, en donde su conductor asistía a un cursillo sobre criminología. Abrieron el vehículo y bajo el asiento colocaron una cápsula de 250 gramos de C-4, un brutal explosivo militar fabricado por Estados Unidos. Unido a la bomba, los autores de la matanza colocaron un teléfono móvil que se activaría a distancia actuando como iniciador de la explosión. Luego sólo hubo que esperar: el conductor tomó el coche y cuando los terroristas decidieron que era el momento, activaron el receptor y la bomba estalló.

La víctima se llamaba Danilo Anderson. Era uno de los más valientes fiscales del país. En aquellas fechas llevaba entre manos un caso especialmente delicado y grave, pues trataba de depurar responsabilidades penales para procesar a los responsables e instigadores del intento del golpe de Estado que el 11 de abril de 2002 a punto estuvo de derrocar al presidente venezolano Hugo Chávez. Lo que estaba encontrando Anderson en su investigación apuntaba directamente a algunos líderes opositores, así como importantes empresarios venezolanos, vinculados, todos ellos, al entorno de varios líderes mundiales. Y, detrás de éstos, una colección de think-tank o "laboratorios de ideas", a los que dedico el contenido del libro El Gobierno Invisible.

Las investigaciones dieron pronto con parte de los responsables del atentado, pero cuando iban a ser detenidos alguien los mató, alguien que no tenía ningún interés en que se conociera la verdad...


«España apoyó el golpe»

Pocos días después de aquel suceso el presidente de Venezuela, Hugo Chávez, visitó España. La ocasión fue aprovechada por Miguel Ángel Moratinos, ministro de Asuntos Exteriores, para desvelar en un programa de televisión que el anterior gobierno español había apoyado el golpe de Estado en Venezuela. De hecho, el ex presidente José María Aznar fue uno de los primeros líderes mundiales en reconocer como nuevo presidente a Pedro Carmona, el empresario que lideró el golpe y que se autoproclamó nuevo máximo mandatario.

Las declaraciones de Moratinos provocaron una intensa polémica. Varios medios de comunicación se echaron al cuello del ministro y en una cadena de radio se rebautizó al líder de la diplomacia española con el apodo de «desatinos». Por su parte, el Partido Popular, en la oposición desde el 14-M pero al frente del gobierno cuando tuvo lugar el golpe, pidió la dimisión del ministro, que, sin embargo, fue ratificado y defendido por el propio presidente, José Luis Rodríguez Zapatero.

Moratinos se vio obligado a comparecer en el Congreso de los Diputados para justificar sus denuncias. Durante su exposición mostró telegramas que certificaban cómo las comunicaciones que mantuvieron en los días del golpe el presidente Aznar y el embajador de España en Venezuela, Manuel Viturro, estaban encaminadas a apoyar a los golpistas, circunstancia que quedó demostrada con otros documentos y pruebas presentadas por el ministro. Sin embargo, los medios de comunicación fueron excesivamente tibios a la hora de reflejar el contenido de aquella comparecencia.

Ese día volvió a demostrarse que existe en España un verdadero prejuicio respecto a la situación política en Venezuela. Tanto se ha alterado la realidad que, si usted pregunta por la calle a cualquier ciudadano, lo más seguro es que piense y crea que Hugo Chávez es un golpista de esos que tanto han abundado en América en las últimas décadas. Su imagen, embutido siempre en un traje militar de campaña, y sus aires histriónicos han sido utilizados para tergiversar una realidad de la que hablan los números, números que dicen que Venezuela creció económicamente en el año 2005 más que ningún otro país del mundo. Se proporcionaron millones de hectáreas a más de cien mil campesinos sin tierra y se pusieron en marcha once mil centros de salud que han reducido a la mitad la mortalidad infantil del país. Sin embargo —y ahí radica el problema— Venezuela crece de espaldas a las sombras que dirigen el mundo desde el 11-S, si bien sería incauto negar la existencia de serios problemas de seguridad y burocracia en el país, que impiden la aceleración del reparto entre los ciudadanos de los beneficios que genera el petróleo.

Con permiso de la Cuba de Fidel Castro, Venezuela y Hugo Chávez se han convertido en los más preclaros enemigos de Estados Unidos en Latinoamérica. Las razones de ese enfrentamiento hay que buscarlas —por enésima vez— en el oro negro. De hecho, Venezuela proporciona el 19 por ciento del crudo que se consume en Estados Unidos, lo que lo convierte en el segundo suministrador del país después de Arabia Saudí. Todo esto quiere decir que el petróleo del país caribeño se ha convertido en fundamental para Washington y sus empresas petroleras aliadas, cuyas riquezas dependen en gran parte de que puedan participar del negocio de la extracción de crudo en Venezuela.

Así las cosas, en Washington no están dispuestos a admitir que Hugo Chávez prosiga en el poder. Y es que si su política de reformas triunfa, todo el continente americano interpretará que la ideología del peculiar presidente es la correcta para salir de la pobreza. Carlos Andrés Pérez, el presidente que precedió a Chávez, convirtió a Venezuela en un país aliado y el petróleo que producía seguía siempre el rumbo marcado por las poderosas empresas norteamericanas. Incluso en los periodos de precios altos, Estados Unidos instaba a sus empresas, tal y como indica Ignacio Álvarez Peralta en su obra Asalto a Bagdad (Editorial Popular, 2003), a contribuir al Sistema reinvirtiendo parte de sus ganancias en la Bolsa de Wall Street, lo cual resulta extraordinariamente rentable en épocas como las actuales, en las que un dólar infravalorado alimenta las inversiones extranjeras en el país. Sólo de ese modo puede equilibrarse la balanza entre importación y exportación, equilibrio que se quebró durante los años noventa y que resultaba necesario recuperar.

Por ello, si el dólar baja y el petróleo sube no es por una crisis sino porque conviene a la economía norteamericana, pero el plan sufriría dificultades si países como Irak, Irán o Venezuela lo desafían. En este contexto, el anuncio de Chávez de negociar el petróleo en euros también supone un serio revés para la Casa Blanca. Frente a todos estos riesgos para el gran capital se inició una campaña de acoso y derribo contra Hugo Chávez. El plan incluía operaciones encubiertas, el patrocinio y financiación de grupos opositores al presidente venezolano y la colaboración del países próximos a Venezuela que se pusieran del lado de Estados Unidos.

Para la consecución de este plan, España ha sido un elemento fundamental. Hasta el 2004, el gobierno estuvo del mismo lado de Estados Unidos; además, la colaboración se plasmó en una masiva venta de armas a Colombia y en la decisiva participación en la trastienda del golpe de Estado mediante el cual se intentó derrocar a Hugo Chávez… (Continuará)

06 noviembre, 2007

8 DE NOVIEMBRE, CITA EN MÁLAGA A LAS 19.30 HORAS


Este jueves 8 de noviembre, a las 19.30 horas, en El Corte Inglés de Málaga estaré presente para efectuar una charla/presentación sobre mi último libro, "El Gobierno Invisible", editado recientemente por la editorial Espejo de Tinta. Al final del acto, la organización habilitará un stand para firmar ejemplares del libro a todos aquellos que lo deseen.

El acto se llevará a cabo en la sala de conferencias de Ámbito Cultural de El Corte Inglés, y será conducido por Rosa María Paraíso. Os invito a todos los que deseéis a estar allí. Como siempre, será un excelente momento para reunirme y charlar con todos los lectores y oyentes. Estáis todos citados allí.

Además, el día anterior estaré presente en el programa "Mis Enigmas Favoritos", que dirige y presenta Luis Mariano Fernández en la Televisión de Benalmádena todos los miércoles a las 22.30 horas. En los días siguientes, toda la cadena de televisiones de ACUTEL (Asociación de Televisiones Locales de Andalucía) emitirá la entrevista que mantengamos.

Aprovecho esta entrada para agradeceros a todos la enorme cantidad de correos que he recibido en relación al fallecimiento de nuestro amigo Juan Antonio Cebrián, el alma y conductor del programa La Rosa de los Vientos de Onda Cero, que como muchos sabréis comencé a presentar la pasada semana. Me ha sido imposible responder a todos, pero en los próximos días intentaré hacerlo. Quisiera daros las gracias a todos por la enorme humanidad y cariño mostrado en vuestras cartas. También en los próximos días insertaré nuevas entradas a propósito de la figura de este gran comunicador que nos dejó el pasado 20 de octubre.

Gracias a todos.

21 octubre, 2007

JUAN ANTONIO CEBRIÁN, TE QUEREMOS


Y junto a nosotros, cientos de miles de personas que lloran tu marcha. Falleciste ayer 20 de octubre, a los 41 años de edad. Tu corazón era tan grande que se rompió. Los nuestros quedan ahora en mil pedazos, pero los recuerdos que dejas y la luz, amistad y amor que diste a tantas personas no caben en esta Tierra que se hizo pequeña para ti. Gracias.

12 octubre, 2007

EL 20 DE OCTUBRE, NOS VEMOS EN ZARAGOZA

El próximo 20 de octubre nos encontramos en Zaragoza. Será durante la primera de las jornadas del "I Ciclo de conferencias sobre Investigación Parapsicológica y Exobiológica". El acto tendrá lugar en el Centro Cívico Río Ebro a las 18.00 horas (C/María Zambrano, 56. ACTUR-Zaragoza). El título de mi charla es el siguiente: "Lo que nos ocultan desde el poder". Además, os informo que el día 27, el ciclo continuará con la presencia del excelente escritor e investigador Javier García Blanco, que hablará sobre "Las claves ocultas del arte", mientra que el 3 de noviembre estará presente Carlos Bogdanich. La asistencia es gratuita y todos estáis invitado. Los que seas de allí, ya sabéis que tenéis una cita en la ciudad más extraordinaria y viva del país.


Otros datos
Y os anticipo una noticia: el 20 de febrero de 2008, servidor publicará su libro número 11. Pero hasta unos días antes no os podré contar nada nuevo... Apuntad otra fecha: 1 de septiembre de 2008. La lista continuará... Mientras tanto, disfrutad de El Gobierno Invisible, que hasta la fecha es mi último trabajo, que presentaré en El Corte Inglés de Málaga a las 20.00 horas del próximo 8 de noviembre.

Y mil gracias a todos los que habéis visitado este blog en su primer mes de existencia. Casi 7.000 visitas es una cifra más que honrosa para una página con tan poco tiempo de vida, teniendo en cuenta que, además, mis recién iniciadas responsabilidades como director de la revista Historia de Iberia me obligan a actualizar el blog menos veces de las que deseara, pero desde ahora mi presencia será mucho más activa.

Un último apunte: feliz día a todos. Celebréis lo que celebréis hoy 12 de octubre. Bien sea el día de la Hispanidad, bien sea el día de El Pilar, el día del desfile de las Fuerzas Armadas o qué se yo, el concierto de Héroes del Silencio en Zaragoza. Pero celebréis lo que celebréis, recordad algo: que nadie os diga lo que tenéis que hacer. Y recordad que también es un día en el que millones de personas sienten que fue el comienzo de una tragedia. Se compartan o no, todos los sentimientos hay que respetarlos porque en todos hay algo de razón. La banderas sólo dividen.

07 octubre, 2007

EL NUEVO ENEMIGO


El diario más serio del planeta publicaba el pasado domingo 30 de septiembre una información a toda página –e incluso en portada, como uno de los temas destacados– en la que podía verse una enorme fotografía de dos muchachos que van a ser ahorcados. La imagen provoca escalofríos. Es despreciable. Y debajo de la fotografía, el titular de la noticia: “Ser homosexual en el país de Ahmadineyah”.

De esta forma, la impresión que se lleva el lector es que en Irán se condena a muerte a los homOsexuales. No nos engañemos: la mayor parte de los lectores miran titulares y pasan página (Me temo que, realmente, esos lectores son los que interesan al sistema). Y, de refilón, se leen algún titular y, como mucho, la entradilla del reportaje. Quienes así lo hicieran, en este caso, leerían lo sIguiente: “Gays iraníes relatan la dureza de vivir en un régimen que niega su existencia y que mantiene la pena de muerte para los desviados”. Así las cosas, dicha entradilla no haría sino reforzar esa idea de que los ahorcados de la imagen han sido asesinados por ser homosexuales.

Ahmadineyad en Estados Unidos
La historia que nos ocupa comienza el 24 de septiembre. Seis días antes. Con esa fecha, el presidente de Irán, Mahmud Ahmadineyad, fue invitado a dar una conferencia en la Universidad de Columbia. Sin lugar a dudas, el rector, Lee Bolinger, cuando le invitó, lo hizo pensando en lo instructivo que podía ser y en las buenas lecciones que podía ofrecer a los alumnos. Evidentemente, la invitación no tenía nada que ver su presunta intención por acaparar la atención de los medios, generar publicidad para su universidad y “suministrar” noticias para las televisiones. Evidentemente, cuando Bolinger le presentó, recordando que había negado el Holocausto y que había amenazado con borrar del mapa Israel, tampoco buscaba aparecer en las noticias. Tampoco buscaba su cita de gloria en la prensa del día siguiente cuando delante de Ahmadineyad le calificó de “cruel y mezquino dictador” (es moda llamar dictadores a quienes han sido elegidos por las urnas, mientras que a quienes no lo han sido –en Pakistán o Arabia, por ejemplo– se les denomina amigos). Tampoco le molestó que cientos de jóvenes se manifestaran a las puertas del recinto protestando contra el iraní, por prometer destruir Israel y negar el Holocausto. Otrora, cuando los estudiantes lo hacían para reclamar sus derechos, eran calificados de revolucionarios infestados…

El problema es que, durante su conferencia, el presidente iraní dijo que el Holocausto sí había existido. En realidad, nunca ha negado su existencia (en los próximos días os voy a ofrecer un reportaje sobre cómo se generó esta leyenda urbana que ha “embaucado” a políticos y opinión pública). Ahmadineyad nunca ha dicho que no murieran cruelmente asesinados seis millones de judíos en los campos de concentración de los míseros nazis. Y volvió a insistir en ello en la Universidad de Columbia. Del mismo modo, tampoco ha dicho jamás que quisiera destruir Israel. Se trata de otra leyenda urbana que, el propio interesado, aclaró durante su charla ante Bollinger. Caray, los manifestantes quedaban en ridículo. Estaban protestando por algo que el hombre contra quien clamaba nunca había dicho. Mal asunto. Insisto, en próximos días explicaré cómo se generó –y los intereses que hubo detrás– esta leyenda urbana.

Peor era el papel que tenían los medios de comunicación, que podían quedar en entredicho si reflejaban fielmente las palabras de Ahmadineyad, que estaba negando que él hubiera dicho alguna vez eso que los medios dicen de él. Me imagino a más de un periodista, en la sala de conferencias, tragando saliva: “¿Y sobre qué escribo yo mañana? ¿Digo que llevo años diciendo que ha hicho lo que no ha dicho? ¿Que yo también he sido víctima de la interesada leyenda urbana?”

Y he aquí que el presidente iraní dijo que era necesario investigar el 11-S y aclarar quién estuvo detrás. Evidentemente, pocos pensaron en hacer demasiado eco del asunto, habida cuenta de que, además, un alto porcentaje de la población tiene la mosca detrás de la oreja sobre qué pasó exactamente. Pero como respuesta a un asistente a la charla dijo algo que sí tenía “jugo”. Su ya famosa frase: “En Irán no existen homosexuales”. Entonces, el mundo entero se lanzó al cuello de Ahmadineyad ante semejante barbaridad. No era para menos. Sin querer, el líder iraní había solucionado la papeleta de los comunicadores. Ya tenían titular. Ya no podían decir que negaba el Holocausto o que había prometido destruir Israel, porque el mismo negó ante cámaras y taquígrafos que hubiera insinuado tales cosas, pero sí podían focalizar todas sus críticas hacia la nueva “revelación”. A las pocas horas, todos los grandes medios de comunicación destacaban en sus titulares que Ahmadineyad aseguraba que no existen gays en Irán. El problema es que tampoco dijo eso exactamente, sino que en realidad se refería a que no existía un movimiento homosexual. Evidentemente, esta apreciación no justifica absolutamente nada, porque no quiere decir otra cosa más que la existencia de una discriminación tal hacia el movimiento homosexual que raya en la persecución, pero en ningún momento negó su existencia.

Información falseada
Es en este contexto en el que surge la información de la que hablaba al comienzo. Se aprovecho el dislate de Ahmadineyad para cargar las tintas contra él, para, en definitiva, seguir dibujando la imagen del enemigo número uno. Y es que la noticia de la que hablaba al comienzo –publicada por el diario El País– genera un lectura a modo de mensaje: “Si eres homosexual en Irán te ahorcan”. Evidentemente, esa es la razón por la cual no existen gays en este país. Sin embargo, a quien se atreviera a leer el reportaje completo –los menos– la primera sensación se diluye, pese a que al comienzo se señala que ser homosexual en Irán es motivo para ser condenado a muerte. No es cierto. Pero es que cuando se lee más dicho reportaje, se descubre que la imagen que ilustra el texto –la de dos hombre que van a morir ajusticiados– corresponde a dos hombres que han sido condenador a morir ahorcados por haber violado a un niño de 13 años. Es decir, que esa presunta sentencia a muerte no existen contra los “desviados” sino contra asesinos y violadores. El matiz es bien relevante en este caso, pese a que nada, ni el peor de los crímenes, justifica bajo concepto alguno la existencia de pena de muerte (que también existe por los mismos motivos en las legislaciones de algunos países que han puesto en su punto de mira a Ahmadineyad). Pero lo importante es que la interpretación original de que ser homosexual en Irán te lleva a la horca se transforma en la letra pequeña en que la condena a muerte es por violación y asesinato. Es bien distinto.

Es más, el lector que hubiera decidido adentrarse en el reportaje, leerá que en Teherán existen barrios homosexuales –como en Madrid, por ejemplo, añado– pese a que exista miedo a mostrar públicamente las tendencias sexuales –como aquí hace apenas unos años, vuelvo a añadir–. E incluso el texto acaba citando la existencia de informes elaborados por organismos internacionales como la Unión Europea en donde se cuestiona que exista persecución a los homosexuales, al menos, más de la que puede existir en muchos países “avanzados”. Sin embargo, al lector visual y de titulares se le ha entregado en bandeja, tanto en portada como en el interior del periódico, la lectura “homosexual en Irán = pena de muerte”. Así se está haciendo campaña para crear un nuevo enemigo. Y no pocos medios de comunicación han entrado en ese juego, hasta los que se autoconsideran como los más serios del mundo…

25 septiembre, 2007

DIRECTOR DE LA REVISTA "HISTORIA DE IBERIA VIEJA"


El pasado jueves 20 de septiembre inicié una nueva andadura profesional. La editorial América Ibérica, a quienes desde aquí transmito todo mi agradecimiento, tras adquirir dicha cabecera, me ofreció dirigir la revista "Historia de Iberia Vieja", una de las publicaciones especializadas en el sector histórico más importantes del mercado editorial. Aunque muy pocos imaginaran que mi camino fuera a discurrir por este camino, la ilusión por conducir a bien puerto esta nueva aventura es un ferviente deseo de servidor.

El primer número de "Historia de Iberia Vieja" se publicó en junio de 2005. De carácter mensual, el siguiente número que saldrá a la venta es el número 28. A partir del siguiente, es decir, del número 29, servidor espera imprimir su sello personal y su filosofía respecto a cómo deben ser las publicaciones especializadas. Dedicada en exclusiva a analizar la historia de España desde Atapuerca hasta ayer mismo, los lectores van a encontrar una revista amena, culta, entretenida y sorprendente, con estudios inéditos, firmas de lujo, historiadores de primera línea y periodistas de investigación. Las ideas, planes y temas que se van a abordar serán novedosos tanto en su contenido como en su planteamiento.

Con una redacción de profesionales envidiable, con Alberto de Frutos como redactor-jefe y Juan Carlos Lucas como diseñador, en próximos días informaré de las novedades que se incorporarán a la redacción de "Historia de Iberia Vieja", así como de los espectaculares fichajes y autores de primera línea que se incorporarán al equipo en muy breve espacio de tiempo y que van a hacer de esta publicación una auténtica pléyade de galácticos. Pero todo a su tiempo...

13 septiembre, 2007

EL ANESTESISTA MAESO, ¿UN CABEZA DE TURCO?





En 1998 cientos de personas descubrieron que eran portadores del virus de la hepatitis C. Casi diez años después, la Justicia determinó que hubo un único culpable: el anestesista valenciano Juan Maeso. Sin embargo, la sentencia reabre el debate sobre las verdaderas causas de la epidemia.


Es de esas citas que merece la pena recordar cada dos por tres. Lo dijo Mark Twain: "Cuando camines del lado de la mayoría, párate a pensar". Este es uno de esos casos respecto al cual la mayoría de los ciudadanos piensa lo mismo. Servidor era uno de ellos. El problema llega cuando se empieza a revisar la información son prejuicios. Ahí comienzan las dudas. En este caso, los periodistas participaron del sentir de la mayoría, logrando reforzar la creencia general. Quizá no se equivocaban. O quizá sí. Evidentemente, las imágenes de las víctimas y de sus familiares, de cuyo dolor es imposible hacerse cargo, invitan a la prudencia y a la búsqueda de una respuesta. La verdad sobre este caso no parece estar del todo clara...

Vayamos al tema.

Juan Maeso se pinchaba con mismas jeringuillas que después utilizaba para anestesiar a los enfermos que iban a someterse a una operación. Lo hacía a escondidas del personal sanitario que estaba junto a él en las operaciones quirúrgicas. De este modo, el médico contagió a 275 personas con el virus de la hepatitis C. Tras nueve años de instrucción sumarial y de juicio, la Audiencia Provincial de Valencia condenó al prestigioso médico a 1933 años de cárcel. La sentencia ha sido del agrado de las víctimas y de los fiscales, además de recibir el aplauso generalizado de la opinión pública.

Sin embargo, no son pocos los que piensan que tras este episodio se esconde una auténtica conspiración para desviar la atención sobre las verdaderas causas de la epidemia de hepatitis C que se declaró en Valencia entre 1988 y 1998. Una crítica que formula la propia defensa del acusado, cuyos abogados recurrieron la sentencia ante el Tribunal Supremo. Consideran que Juan Maeso ha sido el cabeza de turco elegido por las autoridades para ocultar un grave problema de salud pública en Valencia. E indicios para sostener su sospecha no faltan.

Epidemia en Valencia

La presión mediática ha servido para extender la sensación de que Juan Maeso actuó como un auténtico genocida que acabó con la vida de 275 personas. Sin embargo, “sólo” dos de los contagiados, de 71 y 75 años, fallecieron como consecuencia de los problemas derivados de la hepatitis C, una enfermedad que se carecteriza por la infección del hígado y que puede llegar a provocar cirrosis y tumores hepáticos.

Además –y como sostiene el letrado defensor de Maeso, el abogado Francisco Davó– otras 600 personas acudieron a los hospitales valencianos finales de la década de los noventa para someterse a análisis. Todos ellos descubrieron que eran portadores del virus, sin embargo, sus casos no fueron incluidos en la causa al no haber existido ningún tipo de relación entre ellos y el médico. Ya entonces, los partidos de la oposición al gobierno de la Generalitat de Valencia afirmaron que las autoridades sanitarias utilizaron al doctor Juan Maeso como chivo expiatorio para no asumir la responsabilidad ante la falta de control sanitario en los hospitales. De forma inexplicable, el incremento alarmante del contagios de hepatitis C no “despertó” las alarmas de las instituciones médicas.

Ninguno de esos cientos de pacientes cuyos casos no se incluyeron en el sumario contra Maeso saben todavía quién les contagió el virus. Es más, de los 275 que sí forman parte del proceso, más de 40 nunca fueron anestesiados por Maeso y otros 60 presentan determinadas características genéticas en los virus que portan que manifiestan diferencias muy notables con la cepas de hepatitis que se descubrieron en el cuerpo de Juan Maeso.

Además, se da un a doble circunstancia de tipo estadístico. Por un lado, la posibilidad de que una sola persona contagie a 275 de hepatitis C requeriría miles de “intentos”. También hay que señalar que los análisis genéticos demostraron que Maeso es portador de dos tipos de cepas distintas –1a y 1b– y, sin embargo, los 275 infectados sólo presentan el tipo 1a. Por si fuera poco, en 40 de los casos por cuyo contagio ha sido acusado Maeso, las fichas de operación quirúrgica a la que fueron sometidos certifican que fueron otros médicos los que suministraron los opiaceos para la anestesia. Mientras, otros 30 enfermos reconocieron no haber sido nunca tratados por el médico ahora acusado. Por si fuera poco, sólo dos testigos implicaron directamente en los contagios a Juan Maeso, pero la defensa recordó que ambos eran enfermeras que fueron apartadas del servicio por el propio médico, cuyo trabajo fue elogiado por varios de sus compañeros. Además, los peritos forenses que intervinieron en el juicio pusieron en duda la versión oficial de la Generalitat, cuyos responsables fueron los primeros en señalar a Maeso debido a las sospechas de que se drogaba con los fármacos anestésicos.

Una causa desconocida

Uno de los colaboradores del anestesista a cuyo testimonio he tenido acceso, confiesa que jamás presenciaron que el médico se pinchara con las anestesias destinadas a los pacientes. Los análisis médicos tampoco han podido demostrar la presencia en el cuerpo de Maeso de evidencias en este sentido, si bien un estudio genético determinó que Maeso podría ser el origen común de todos los casos de hepatitis C personados en la causa. Esto se debía a que el médico se infectó entre 1984 y 1991 mientras que todos los casos denunciados son posteriores a 1988.

Sin embargo, existe la probabilidad de que Maeso enfermara después que muchos de los otros pacientes. De hecho, él aseguró en el juicio que fue un infectado más. Además, en el Hospital de la Fe, donde trabajó hasta febrero de 1998, se registraron 190 nuevos casos de hepatitis C después de que el anestesista fuera suspendido de su cargo.

Así pues, ¿fue otro el origen del brote de hepatitis en Valencia? Los propios fiscales recordaron tras la sentencia que fue el Gobierno autonómico el que indicó quién era el culpable: “Desde el año 1998, cuando la administración empieza a señalar al acusado empezamos a trabajar con él como sospechoso”, admite Javier Carceller, fiscal del caso que señaló durante la vista oral que el “rumor generalizado” de que Maeso era drogadicto facilitó la argumentación para implicarlo. La defensa de Maeso sostiene, a consecuencia de ello, que el médico fue elegido como cabeza de turco. En breve, los jueces del Tribunal Supremo deberán dirimir si, además de Maeso, hubo otras causas para explicar el brote epidémico que afectó a cientos de valencianos.

11 septiembre, 2007

SEXTO ANIVERSARIO: Y LA VERDAD, ¿PARA CUÁNDO?


Un martes como el presente, pero de hace seis años, los brutales atentados terroristas en Nueva York y Washington dieron inicio al siglo XXI. En las próximas horas, Al Qaeda dará a conocer un vídeo en el cual Osama Bin Laden –con la barba teñida– dará a conocer un nuevo mensaje. Será el primero en el que se pueda ver su imagen tras la aparición estelar del líder de Al Qaeda tres días antes de las elecciones que dieron a George Bush su reelección como presidente de los Estados Unidos. Entonces, su prime time en las televisiones de medio mundo fue fundamental para el presidente norteamericano.

Y es que Bin Laden "pidió" el voto para John Kerry, el hombre que pugnaba contra el texano por gobernar el país más poderoso. Gracias al providencial favor del líder terrorista, Bush consiguió dar un vuelco a las encuestas –le empezaban a dar como perdedor–, a las que sólo hizo falta añadir unos pequeños "retoques" en el recuento de votos en Florida y Ohio para ganar nuevamente en su carrera hacia la Casa Blanca. En esta ocasión, la nueva aparición de Bin Laden promete ser igual de providencial. Se va a producir pocas horas después de que se anunciara el comienzo de la retirada de tropas norteamericanas en Irak. Además, se va a producir al mismo tiempo que surgen nuevas informaciones sobre las teorías alternativas a la versión oficial. No es tema baladí.

Y es que según dos nuevas encuestas, entre el 36 y el 51 por ciento de la población norteamericana se formula preguntas incómodas sobre qué sucedió ese día. Al mismo tiempo, aparecen nuevas revelaciones e informaciones que cuestionan el papel del Poder en aquel evento. Casualmente, una página web considerada como portavoz de Al Qaeda –página a la que, por lo visto, dejan actuar a su antojo, ¿por qué?– anuncia que en el nuevo vídeo se incluirán los "testamentos" de los 19 suicidas que protagonizaron aquel episodio. Y todo esto cuanto más se pone en duda el papel que tuvieron en aquellos hechos.

Es por ello que el autor promete nuevas informaciones en las próximas horas y días sobre este evento del que cada vez duda más gente... Entre los últimos en unirse a esta gigantesca corriente que pide la verdad sobre el 11-S (y tener esa respuesta nos puede aclarar mucho sobre lo sucedido en Londres y Madrid) puede citarse a una de las científicos más importantes de las últimas décadas. Me refiero a Lynn Margulis, que fue galardonada como Medalla Nacional de Ciencia por la Casa Blanca en 1999. Asegura que la versión oficial es incompleta, contradictoria e increíble. Y se ha unido a la larga lista de científicos que está presentando la petición formal para que se efectúe una investigación independiente de verdad.

Por su parte, un veterano periodista como Robert Fisk, quizá el más importante de todos los corresponsales en Oriente Medio, ha publicado recientemente un artículo de opinión en The Independient, en el cual admite que también él se hace preguntas: "No me vengan con complots. Pero a mí, como a cualquier hijo de vecino, me gustaría saber la verdad entera de lo que ocurrió el 11/9". Y recuerda la sentencia del asesor de Bush: "Ahora somos un imperio: creamos nuestra propia realidad". Además, Fisk, aunque no del todo atrevido, sí expone cómo, en muchas ocasiones, los opuestos a las versiones oficiales del 11-S caen en errores graves y comportamientos que en nada ayudan a elevar sus preguntas "a los de arriba".

Las próximas horas prometen ser interesantes... Les informaré.

Bruno Cardeñosa es autor del libro 11-S: Historia de una Infamia (Ed. Corona Borealis, 2003, 6º edición) y La Jugada Maestra (Ed. Temas de Hoy, 2005), obras en las que se reconstruyen algunos de los puntos oscuros que rodean al 11-S y la versión oficial sobre Al Qaeda.

UNA ENTREVISTA CENSURADA...

Hace justo dos años, los periodistas de un semanario español de gran prestigio me efectuaron una entrevista tras la publicación de mi libro La Jugada Maestra. Cuando iba a ser publicada, un fotógrafo acudió a mi domicilio para efectuar el reportaje gráfico. Pero justo antes de entrar en máquinas, pocas horas antes de ver la luz, la entrevista se “evaporó”. Alguien impidió su publicación. Y eso que se me aseguró que podía responder con total naturalidad y sinceridad. Que eran preguntas ácidas y que las respuestas podían serlo también. Y atendí la petición…

Tampoco puede considerarse que las contestaciones seas desestabilizadoras, ni mucho menos. Son sinceras. Y eso basta. Quizá ahí está el problema: que eso basta para la censura… O para la autocensura. Me temo que se han asimilado e interiorizado por parte de algunos periodistas y comunicadores unas serie de normas no dictadas sobre lo que se debe decir.

Se me pidió que eligiera el título de la entrevista. Se me dijo que fuera una frase sincera. Elegí el siguiente: “Mientras lees esta frase, un niño muere de hambre por culpa del Poder”. Siempre me produjo cierta desazón el hecho de conservar el original de esa conversación en un cajón (lease una carpeta del ordenador). Ahora, aprovecho la “inauguración” de este blog para dar conocer este texto, con la esperanza de que no quede olvidadada en el tiempo.

1-. “Amarás a tu prójimo con a ti mismo…” ¿Era una boutade o un error del traductor? Prefiero pensar que es una profecía que todavía está por cumplirse.

2-. ¿Qué milagro le parece más increíble: que Lázaro resucite y gane la maratón de Nueva York, que aterrice un platillo volante en la Puerta del Sol o encontrarse a un ex ministro en la cola del paro? ¡Ah! Pero, ¿no van al para los ministros cuando cesan en sus cargos? No me diga usted que es uno de esos conspirativos que cree que las grandes empresas ofrecen altos cargos en los Consejos de Administración a los ex ministros que les favorecieron mientras ocupaban sus puestos.

3-. La estadística es inapelable: las chicas leen en España casi tres veces más libros que los varones. ¿Cuestión de seso o de sexo? De seso, aunque por el tópico alguno me llamará sexista, pero para arreglarlo le diré que no tiene justificación que haya tres veces más autores que autoras. Y eso si es algo que debe arreglarse.

4-. Problema de matemáticas: si la historia la escriben los vencedores, ¿quién les dirá a los que vienen detrás que este mundo estaba repleto de corazones colorados, sabios que no se bajan los pantalones, niños que sueñan en voz alta, maestros con vergüenza torera, socios del Atlético de Madrid…? En fin, buena gente, perdedores. Se lo dirán los poetas, porque cuando se apague la libertad todavía quedarán las metáforas para poder disimular las palabras verídicas ante los censores. Porque los vencedores algo no conocen: que nos sabemos esconder y utilizar otro tipo de armas para desde ahí, invitar a seguir soñando.

5-. ¿Sospecha usted qué existe más allá del bien y del mal? No lo sé, pero aún creo en Dios y se lo preguntaré. Eso sí, antes me va a tener que dar muchas explicaciones.

6-. ¿En qué somos todos y todas unos cobardes? En enfrentarnos a la verdad de las cosas, que nos da más miedo que la muerte, especialmente cuando esa verdad nos desdibuja el mundo que han creado a nuestro alrededor como un traje a medida para que no protestemos. Nos da miedo saber que son otros, y no nosotros, quienes nos visten.

7-. ¿Qué plato alimenta más: una merluza a la vizcaína, cien gramos de ternura o una ración de venganza? La ternura, sin duda, pero los que están arriba prefieren llenarnos el estómago con la merluza para que justifiquemos sus venganzas.

8-. ¿Cómo se llama el miedo más antiguo del hombre? Eva.

9-. ¿Y el de la mujer? Sólo tienen miedo al miedo del hombre, aunque puestos a dar nombres, a veces teme un poquito a algunas cosas de "Pepe".

10-. A estas alturas de su cuenta corriente, ¿sabe ya para qué sirve el dinero? Debería servir para comprar tiempo, pero a medida que ese tiempo pasa me temo que sólo sirve para matar al futuro.

11-. ¿Cuál es el verdadero lema de la derecha nacional: “Todo por la patria” o “Todo por la pasta”? “Todo por la patria”, pero a veces traiciona el subconsciente y confunden patria con pasta. Un pequeño “lapsus lingue…”

12-. ¿Qué tiene “El Código Da Vinci” para haber batido todos los récords de ventas en librerías en estos últimos tiempos? ¡Anda hombre, que se lo voy a decir yo! Déjeme averiguar si he encontrado la fórmula cuando se publique mi próximo libro, no vaya a ser que alguien se me adelante. En serio: creo que magia, una fórmula del autor para llegar a las fibras de los lectores.

13-. ¿Qué sospecha que desaparecerá antes de la Tierra: el hambre, el hombre o el sentido del humor? Seré optimista: el hombre (al menos el monstruo en el que se ha convertido). Sólo entonces podrá desaparecer el hambre.

14-. ¿Conoce usted alguna fórmula o hechizo para que Ciencia, Ética, Libertad y Progreso se metan en la misma cama, conciban y den a luz un proyecto de sociedad más lúcida, justa y humanitaria que la que tenemos ahora? Usted lo acaba de decir: deben acostarse lúcidos, justos y humanitarios. El problema es que para los que están en el Poder, poner en práctica esas condiciones les coge un poco a desmano.

15-. A mí, desde la llegada del euro, España me duele un 20 % más. ¿Soy un derrochador o un hipocondríaco? ¡Un optimista! Porque a mi me duele un 66 % más. Antes pedía un café y pagaba con una moneda de cien pesetas. Ahora, el mismo café lo sigo pagando con una moneda, pero vale 166 pesetas. (Actualización: ahora duele un 100 %, teniendo en cuenta que el café cuesta una media de 1,20. Hay que tener en cuenta cuándo se hizo la entrevista)

16-. Soñar es gratis. ¿Qué misterio le gustaría desvelar? Permítame elegir dos. Uno terrenal: saber quién estaba detrás del 11-S, porque a estas alturas el cuento ese de Bin Laden y Al Qaeda pues va a ser que ya no me lo creo. Y otro más espiritual: saber si estamos solos en el Universo.

17-. ¿Qué ve usted si gira la nuca hacia una fecha arrancada del calendario: el 11-S? Bueno, que ese día fui al cine cuando puse el telediario de las tres. Lo bueno es que esa película me salió gratis y la vi desde el sofá. Lo malo es que los muertos eran de verdad. Cada día tengo más claro que asistí al engaño más grande de todos los tiempos.

18-. Saque su bola de cristal y dígame quien manda REALMENTE en este mundo. No tengo una bola de cristal a mano, pero sí algo redondo. Un CD que está sonando en mi ordenador ahora. El poeta que canta dice algo sobre las alimañas que habitan algunos consejos (de Administración, claro).

19-. ¿Qué le han birlado más veces: la cartera, el corazón o la ilusión de seguir creyendo en un mundo mejor? El corazón me encanta perderlo. La cartera, ¿a quién no se la han robado? Pero la ilusión en un mundo mejor, ¡eso no me lo roba ni Dios!

20-. ¿A qué huele un pozo de petróleo? Debería oler a la riqueza de los pueblos en los que emergen los yacimientos, pero sólo huele a la dinamita de las bombas de quienes se quieren enriquecer a costa de esos pueblos.

21-. ¿En qué supera casi siempre la realidad a la ficción? Ni el mejor novelista –ni Tom Wolfe cuando describe en Todo un hombre a determinados personajes– ha sido capaz nunca de reflejar la maldad intrínseca de quienes intentan perpetuarse en el poder económico y político. Son capaces de cualquier cosa, de todo lo malo que podamos imaginar.

22-. ¿Sospecha usted por qué el término basura se ha puesto tan rabiosamente de moda en nuestra sociedad? No sé si ha querido usted decir sociedad o suicidad. Quizá es por eso: hemos dado el salto de una expresión a otra. Aunque a veces se califica de basura aquello que significa ir contra lo establecido, como si eso fuera algo malo.

23-. Al que pone una bomba y se lleva por delante la vida de unos seres inocentes se le califica de terrorista. Y a los responsables de ese bombardeo invisible de miseria que asesina a millones de personas cada año en el mundo, ¿cómo hay que denominarlos? Ya se lo he dicho antes, parece usted un conspirativo de esos. En serio: los segundos son los maestros de los primeros.

24-. ¿Qué les estamos hipotecando –para siempre– a los niños de este planeta? La forma en la que deben hacer las cosas. Dentro de poco ya no se acordarán de que no es necesario pisar al prójimo para alcanzar algo.

25-. La sombra del ciprés es alarga… ¿Y la del Vaticano? Gorda. Más ancha que larga. Sólo así puede resguardarse de ver la luz dos mil años de miserias. Afortunadamente, ni Dios ni Jesús se cobijan ahí.

26-. ¿En qué perdemos el tiempo lamentablemente la inmensa mayoría de los seres humanos? En querer parecernos a los animales (con todos mis respetos para las 5000 especies de mamíferos de la Tierra).

27-. Acláreme un enigma que me quita el sueño desde que tengo uso de razón. Puesto que madre no hay más que una, ¿qué ha hecho la Mamá Naturaleza para que sus hijos la tratemos a patadas desde tantas y tantas primaveras? Tratarnos bien pese a darle una patada siempre que podemos. Es el sino de las madres, pero como no nos demos cuenta a tiempo, se va a hacer mayor antes de tiempo…

08 septiembre, 2007

EL LIBRO “EL GOBIERNO INVISIBLE” DESVELA LA RELACIÓN ENTRE LOS GRUPOS DE PODER Y EL 11-S



"Para que este plan pueda llevarse a cabo, quizá sea necesario que se produzca un suceso catalizador, un nuevo Pearl Harbor". Esta afirmación quedó reflejada por escrito en un informe efectuado por mandatarios del gobierno norteamericano un año antes de los atentados terroristas del 11 de septiembre de 2001, suceso del que se cumplen seis años en estos días.

La "predicción" aparece en un informe efectuado por el Proyecto Nuevo Siglo Americano (PNAC), un think-tank o grupo de poder en cuyas filas se encontraban algunos de los hombres que, pocas semanas después, se convertirían en los principales colaboradores del presidente de Estados Unidos, que aún no había ganado las polémicas elecciones que le llevaron a la Casa Blanca.

En dicho informe, se explicaba al próximo presidente de los Estados Unidos cuáles deberían ser las acciones internacionales necesarias para perpetuar el dominio global del país durante el siglo XXI. Entre esas acciones se citaban la invasión de Irak o la ocupación militar de territorios de Asia Central como Afganistán.

Las inquietantes revelaciones sobre los trapos sucios del PNAC aparecen en el libro “El Gobierno Invisible”, de Bruno Cardeñosa, publicado recientemente por la editorial Espejo de Tinta. En dicha obra se analiza el papel que juegan en el destino del mundo algunos grupos que operan a espaldas del poder. Dichos grupos se han denominado think-tank o laboratorios de ideas. Como en el caso del 11-S, las predicciones que efectúan se convierten en auténticas profecías. Tanto es así que el autor plantea la posible implicación de algunos de sus miembros en sucesos como los ocurridos el 11 de septiembre.

Según aparece reflejado en las páginas del libro “El Gobierno Invisible”, los laboratorios de ideas planificaron desde los años noventa del pasado siglo la aparición de un nuevo enemigo mundial que sustituyera a la recién desmoronada URSS. El nuevo enemigo debía servir como excusa para sustener los presupuestos del aparato industrial militar, así como para justificar acciones bélicas destinadas a controlar los recursos energéticos.

Los responsables de esos grupos acabaron ocupando importantes cargos en la Administración de los Estados Unidos. Además, estos grupos de poder tuvieron mucho que ver con el apoyo financiero que se dio a la creación de grupos islamistas en Oriente Medio. De hecho, fueron miembros de estos think-tank quienes promovieron la figura de Bin Laden como responsable del control de dichos grupos, debido a las relaciones que por entonces él y su familia mantenían con la realeza de Arabia Saudí y los servicios secretos de Pakistán. (Nota de prensa de la editorial Espejo de Tinta)